Tom Curry, tercera línea del seleccionado de Inglaterra, asistió a una audiencia del Comité Disciplinario independiente por una infracción contraria a la Ley 9.13 (tacleada peligrosa) como resultado de una revisión realizada por el Oficial de Revisión de Juego Sucio en el partido del Grupo D de la Copa Mundial de Rugby 2023 de Inglaterra contra Argentina en Marsella el 9 de septiembre.
El jugador aceptó la tarjeta roja y fue suspendido por dos partidos (sujeto a la finalización del Programa de Intervención de Entrenadores). El Comité Disciplinario independiente estuvo presidido por Adam Casselden SC (Australia), acompañado por los ex jugadores John Langford (Australia) y Jamie Corsi (Gales).
El jugador aceptó que se produjo un juego sucio y que la infracción merecía una tarjeta roja. El Comité tomó nota de que la infracción conlleva una sanción mínima obligatoria de rango medio (seis partidos), y habiendo considerado los factores atenuantes, incluida la admisión de juego sucio y la exactitud de la tarjeta roja en la primera oportunidad, un historial disciplinario ejemplar, disculpas al Jugador y buen carácter, redujo la sanción con la atenuante máxima del 50 por ciento.
La sanción final de tres partidos se aplicará de la siguiente manera:
Inglaterra vs Japón, 17 de septiembre
Inglaterra vs Chile, 23 de septiembre
Inglaterra vs Samoa, 7 de octubre (El jugador podrá jugar en este partido sujeto a la finalización exitosa del Programa de intervención de entrenadores*)
* El jugador tiene la intención de postularse para participar en el Programa de Intervención de Entrenadores de World Rugby para sustituir el partido final de la sanción por una intervención de entrenador destinada a modificar técnicas específicas y cuestiones técnicas que contribuyeron al juego sucio sujeto a su finalización exitosa.
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