El campeón del torneo Seis Naciones contra el ganador del Tres Naciones y una repetición de la final de la Copa Mundial será el sábado el apetitoso realce de un día ocupado e importante de rugby internacional.
LONDRES, nov 21 (Reuters) – El campeón del torneo Seis Naciones contra el ganador del Tres Naciones y una repetición de la final de la Copa Mundial será el sábado el apetitoso realce de un día ocupado e importante de rugby internacional, en el que también se presentarán los Pumas argentinos.
Nueva Zelanda viajará a Cardiff buscando completar la tercera etapa de su gira de Grand Slam ante Gales, mientras que Inglaterra querrá cobrarse algo de revancha contra Sudáfrica, después de su derrota en la final de la Copa Mundial en París hace 13 meses.
Francia enfrentará a Australia en París, Irlanda se medirá con su viejo rival Argentina en Dublín, Escocia recibirá a Canadá en Abeerden y las Islas del Pacífico continuarán su búsqueda para obtener su primera victoria cuando viajen a Reggio Emilia para vérselas con Italia.
Irlanda y Argentina han desarrollado una saludable rivalidad, luego de algunos clásicos encuentros en el Mundial y su choque en Croke Park podría considerarse el mayor impacto del día para los rankings de cara al cuadro de la Copa del Mundo 2011.
Los Pumas, que terminaron terceros en el torneo del 2007, esperan mantenerse en la actual cuarta colocación del escalafón para conseguir un grupo más accesible para el Mundial.
Irlanda necesita desesperadamente evitar caer de su actual octava plaza, lo que la pondría en el tercer grupo para el Mundial y haría más difícil su avance hacia los cuartos de final.
Los partidos revisten más importancia que los usuales de noviembre, ya que están en juego los puntos para el ranking de cara al sorteo del 1 de diciembre para la Copa Mundial 2011.
Ese torneo puede parecer un objetivo distante, pero cuatro equipos – Argentina, Inglaterra, Francia y Gales – están en la lucha para ocupar ese vital cuarto puesto y evitar enfrentarse con alguno de los equipos del Tres Naciones en la etapa de grupos, mientras que la batalla para permanecer entre los ocho primeros es aún posiblemente más importante.
Nueva Zelanda nunca tiene que preocuparse por esos asuntos y puede, en su lugar, concentrarse en intentar lograr su tercer Grand Slam.
Gales no ha vencido a los All Blacks desde 1953, aunque estuvo cerca hace cuatro años cuando cayó 26-25.
Sudáfrica está también sintiendo la presión mental y psíquica de una larga campaña, pero el entrenador de Inglaterra Martin Johnson se tomó a broma la sugerencia de que sus rivales podrían estar por debajo de su usual nivel en Twickenham.
Johnson, frustrado por el fracaso de Inglaterra de convertir la posesión de pelota en puntos en la derrota de la semana pasada ante Australia, realizó sólo un cambio para el sábado con la introducción de su potente ala James Haskell.
Luego de haber vencido a los Springboks siete veces consecutivas desde el 2000 al 2006, Inglaterra ha caído ahora cinco veces seguidas ante ellos, incluyendo una humillante derrota 36-0 en la etapa de grupos del Mundial y otra caída 15-6 en la final.
En tanto, Francia apunta a recuperar algo de respeto por parte de los Wallabies, luego de enviar un equipo de segunda línea a Australia en el verano y haber sido vencido en dos ocasiones entre caústicos comentarios por parte de la prensa.
Escocia es el equipo que se mantiene en el noveno lugar y buscará evitar perder ante Canadá.