El flamante presidente de la casa madre de la ovalada nacional recibió a AlRugby. Mano a mano imperdible con el dirigente surgido en Duendes quien habla de su proyecto el cual comenzó el 31 de marzo.
Ahoras de haber asumido como presidente de la Unión Argentina de Rugby (UAR), el rosarino Carlos Araujo dialogó a agenda abierta con AlRugby. El hombre fuerte de Duendes habló sobre los desafíos que tendrá su gestión, el legado que toma y el que quiere dejar, la importancia de preservar el amateurismo en los clubes, Los Pumas, el Centro de Alto Rendimiento, el ingreso al Súper Rugby y también sobre Agustín Pichot.
Ser presidente de la UAR. Es un halago muy grande que las Uniones del país hayan confiado en mí para que los represente y represente a todo el rugby argentino. Es un mérito más de los electores que del elegido, que es saber elegir. Son muchos años, pues ya llevo casi 43 años entre entrenador y dirigente, por lo que esto es una consecuencia natural
Primer desafío. El inmediato y más importante es seguir reforzando la estructura de Los Pumas, los Pladares, los Centros de Alto Rendimiento, tenemos que tener muy en claro que el nervio motor económico del rugby argentino son los seleccionados nacionales, ellos son los que producen el dinero. El segundo punto importante es seguir creciendo en cantidad y calidad de jugadores y dirigentes, vamos a encarar una etapa muy importante en la capacitación dirigentes, tenemos mucha gente amateur o no rentada que está trabajando en el rugby, que está pidiendo que desde la UAR se hagan cursos, se dicten orientaciones para todas esas personas que son grandes amantes de este deporte que se arriman desinteresadamente a colaborar y necesiten orientación.
El legado. El gran desafío de todo aquel que le toca conducir es dejar un espacio de continuidad. Me siento un continuador de la política que inició Lucho Gradín con la nueva orientación del rugby argentino; también de Emilio Perasso, el sabía lo que quería y dónde quería ir; después Porfirio Carreras y Cacho Castillo por sobre todos, con cuatro años como presidente. Yo voy a seguir por ese camino, espero que los que vengan después no den marcha atrás, que continúen por este sendero. Es decir como todos los grandes constructores, que se construya sobre lo edificado sobre lo que se ha programado y diagramando, para que no haya marchas y contramarchas que tienen las malas instituciones.
Clubes amateur. El rugby argentino está sustentado sobre una política amateur o no rentada de clubes, y la tenemos que preservar. Ya la Argentina ha decidido que lo que va a ser profesional son seleccionados y no clubes, y de ahí en más los jugadores seleccionados irán integrando diferentes lugares de competencia. Ahora se abre la posibilidad de un espacio nuevo, de participar del Súper Rugby con un equipo, lo que nos va a permitir mejores chances en la Championship y en los Mundiales, que en este momento lo pienso yo y todos los que están trabajando en la UAR que si no tenemos una competencia previa de nivel de Súper Rugby es difícil que podamos obtener resultados positivos, pese a que el argentino siempre va a ganar haciendo poco.
Pumas federales. Realmente es una política que se viene llevando, hay que desmitificar el tema. Es necesario porque Los Pumas jugando en todo el país ayuda a la difusión del rugby, pero sobre todo es un tema económico, es muy difícil hacer partidos sucesivos en una misma sede, porque el público pierde interés y sabemos que las entradas tienen su precio y se produce un desgaste. Sabemos que al rotar Los Pumas por distintas sedes, contribuimos a la difusión y que todos puedan ver a su seleccionado.
Agustín Pichot. Es muy difícil que alguien lo eche a Pichot porque vos no podés echar a una persona que es tan necesaria y que ha colaborado tanto con el rugby argentino, independientemente que yo tenga una amistad personal, me parece que pensar que Pichot se tiene que abrir del rugby argentino es pensar que estamos tomando un camino diferente y de retroceso. Nosotros tenemos en estos momentos una persona con la calidad que tiene Pichot para poder insertarnos al rugby internacional, esa es la realidad.
Nacional de Clubes. Estoy muy conforme con el Nacional de Clubes; este torneo es un evento extraordinario y hay que aclararlo: tiene una cantidad de fechas determinadas, si bien hoy tenemos ocho fechas queremos que sean nueve, pero no queremos que se avance sobre los torneos regionales. Es un torneo que empieza y termina, y todos los equipos que participan clasifican desde su torneo doméstico, con lo cual en un momento se habló que este torneo iba a invadir los espacios de otros, es un especie para que todos los clubes del país se pueden encontrar en un momento y en una competencia que los unifique.
Súper Rugby. Lo que está sucediendo en las Uniones del hemisferio sur es que la franquicia es manejada por una sociedad independiente, así que de seguro nosotros vamos a seguir la misma orientación, no vamos a inventar nada, lo más seguro que para ese tipo de conducción necesitemos personas realmente idóneas con experiencia internacional, y lo más probable es que contratemos a un CEO extranjero para llevar adelante esta primera etapa.
Mensaje al rugby argentino. El rugby es un deporte formativo por excelencia, es un deporte de contención, es un deporte que tiene que ser interpretado por los gobiernos como un lugar de inserción social y sobre esa base, protegiendo a nuestro nervio motor que son Los Pumas, vamos a lograr el crecimiento de todo el rugby de base.
Por: Lisandro Olearo
www.alrugby.com
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