Los Pampas XV cierran la etapa de preparación con un amistoso frente a los M20 de Waratahs en Australia. El fin de semana cayeron con Western Force pero dejaron una muy buena imagen.
Pampas XV, tras el gran partido jugado ante Western Force (independientemente del resultado desfavorable, pues no es la intención analizarlo desde ahí) se prepara para jugar ante el equipo de menores de 20 años de New South Wales (los Waratahs M20) el próximo sábado y llega a este compromiso con un extenuante plan de viaje que incluyó el periplo Sydney-Perth-Sydney merced a un calendario un tanto desafortunado desde el punto de vista logístico-fisiológico, por la cantidad de horas de vuelo y alteraciones abruptas en los horarios en muy pocos días. Eso es un detalle a tener en cuenta a la hora de evaluar al equipo al menos en estos dos primeros compromisos.
El partido ante los Waratahs M20 significará el último de los únicos dos partidos de preparación que Pampas XV tendrá antes del inicio de la Pacific Rugby Cup tiene una sola duda entre los treinta jugadores y es Javier Rojas, con un golpe en el cuello (está bajo observación del médico de la delegación). Después, los 29 jugadores estarán disponibles.
El equipo que saldrá a la cancha aún es una incógnita, pero seguramente haya cambios respecto al que salió de entrada para jugar en Perth. También habrá llegado Daniel Hourcade tras su visita a las posibles sedes que Los Pumas tendrán en Inglaterra para el Mundial, con lo que seguramente el staff tendrá la asistencia del head coach argentino, que seguirá mirando jugadores de cara no sólo a la Pacific Rugby Cup sino pensando en los tests de junio con Irlanda y Escocia.
Presente y futuro ¿auspicioso?
El equipo rindió en buena medida por encima de las expectativas previas y no hubo que ver el partido (que tampoco se emitió) para afirmarlo.
La derrota -porque en definitiva, para los resultadistas lo que cuenta es que hubo una derrota- realmente no molesta, no influye en el ambiente del campamento Pampa y para lo que sirve es para establecer parámetros hacia el futuro. Es el inicio de esta nueva camada de jugadores y entrenadores. El puntapié inicial. Para tener un buena medida bastó con seguir durante el partido los comentarios de Daniel Hourcade y de otras personas presenciando el partido allá lejos en vivo y en directo en Perth para darse cuenta de que la diferencia – existente, lógica, presumible, entendible- no fue tal y que el equipo se plantó en la cancha aplomado, físicamente bien plantado, con ritmo de Súper Rugby y generando peligro en el ingoal rival. Lamentablemente, algunos errores propios le impidieron a los argentinos llegar a la meta aussie, pero en términos generales, rugbísticamente, tanto en el primer tiempo como en el segundo, se consiguió estar a la altura. Si los Pampas fueron superados fue porque Western Force es un equipo hecho y derecho que consiguió imponer su ritmo (está a una semana del debut en el Súper Rugby) y que consiguió desequilibrar a una defensa que tiene todavía mucho camino por recorrer.
¿Un análisis primario? Este equide Pampas salió muy bien parado de este primer partido, con más cosas positivas que negativas en el balance, sin lesionados de gravedad y con la sensación de que éste es el piso del equipo para el futuro inmediato.
Otro análisis es que, a dos años de la posible entrada al Súper Rugby con una franquicia argentina, está claro que con ese tiempo de trabajo por delante los jugadores basados en Argentina estarían en perfectas condiciones de asumir el compromiso de jugar en dicho certamen, sin necesidad de requerir a todos los ‘europeos’ para no ‘sufrir’ los embates de un rugby que no da respiros.
Por: Eugenio Astesiano
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